Madrid. (EFE).- El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha ensalzado el compromiso continuo que está demostrado el presidente francés, Nicolás Sarkozy, con el futuro de la UE y del euro, y que le llevó incluso a encontrarse ayer fuera de su país cuando estaba a punto de dar a luz su mujer, Carla Bruni.
Zapatero estaba preparando ayer en el Palacio de la Moncloa junto a sus colaboradores la cumbre europea que se celebrará el próximo domingo en Bruselas y que es de especial trascendencia económica cuando fue informado del nacimiento de la hija de Sarkozy y Bruni.
Fuentes del Ejecutivo han informado de que Zapatero abandonó el encuentro para enviar un telegrama de felicitación al presidente francés y, al reincorporarse a la reunión, alabó el compromiso que el jefe del Estado galo está demostrando con Europa y con el euro.
A su juicio, hay que agradecer gestos como el de ayer, ya que, aun cuando sabía que su mujer estaba a punto de dar a luz, Sarkozy se trasladó a Fráncfort para reunirse con la canciller alemana, Angela Merkel, con el fin de preparar el Consejo Europeo de Bruselas.
Sarkozy asistió igualmente a la ceremonia de despedida del cargo del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, donde coincidió también, entre otros, con el nuevo responsable de esta institución, Mario Draghi, así como con los presidentes del Consejo y de la Comisión Europea, Herman Van Rompuy y José Manuel Barroso.
Zapatero felicitará personalmente al presidente francés el próximo domingo cuando ambos coincidan en la cumbre de la UE, pero en el telegrama que le envió ayer ya le trasladó su enhorabuena y la de su esposa, Sonsoles, al tiempo que le expresó sus mejores deseos para la recién nacida. "Deseo -decía en el telegrama- que viva en ese mundo mejor por el que me consta que estás trabajando cada día".
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